Hoy los compañeros de la P.A.E. me han brindado la oportunidad de publicar en nuestro Blog , el mismo que con tanto cariño y esfuerzo mantienen limpio, pulido y en perfecto estado de revista Manuel Gris e Iván Albarracín
La entrada se corresponde a un relato «histórico», podéis encontrarlo en nuestra web, para abreviaros el camino, aquí os dejo el enlace directo: Matías. Además de leerme, os recomiendo que dediquéis un rato a revisar las que me acompañan, a lo largo de las últimas semanas mis «hermanos» han ido escribiendo relatos y reflexiones que merecen ser leídas. Encontraréis diferentes estilos, sensibilidades y perspectivas, todas ellas de una calidad excelente.
En cuanto a mi relato, forma parte de un proyecto, inconcluso por el momento, que debía componerse de cuatro o cinco historias sobre otros tantos personajes. El nexo de unión entre todos ellos es la relación de amistad que mantienen, amistad nacida en la infancia y en el patio del colegio, donde los raros se unen porque no les queda otro remedio y ya se sabe que semejante atrae a semejante. Singulares todos ellos, aislados del resto en su desolación y tristeza, se reúnen en su peculiaridad y encuentran, aunque solo sea en los breves instantes del recreo, un lugar común en el que convivir y compartir el silencio y la soledad. Estoy seguro que todos hemos convivido en los patios con grupos semejantes y algunos de nosotros, entre los que me incluyo sin vergüenza, hemos formado tribus semejantes en uno u otro momento.
Confío que disfrutéis de su lectura y Matías no os resulte indeferente.